Más allá de la música: La faceta paternal de Kalimba

En el mundo del entretenimiento mexicano, Kalimba Kadjaly Marichal Ibar, mejor conocido como Kalimba ha dejado una marca imborrable. Con una carrera que abarca décadas y una versatilidad artística que va desde la música hasta el teatro, Kalimba ha cautivado a audiencias de todas las edades. Sin embargo, detrás de los reflectores y las ovaciones del público, yace una faceta más íntima y personal: la de ser padre.

Kalimba hijos

A pesar de no haber contraído matrimonio, Kalimba ha formado una familia sólida y amorosa. Con dos hijos, frutos de romances pasados, este talentoso cantante y actor demuestra que el amor y la responsabilidad van más allá de las convenciones sociales.

La llegada del primer hijo de Kalimba fue el 23 de julio de 2008. Aitana marcó un momento trascendental en su vida. Junto a su entonces pareja, Luz María González, dieron la bienvenida a esta hermosa niña, quien hoy en día tiene 16 años.

En una conmovedora publicación, Kalimba compartió su profundo amor por su hija en su décimo cumpleaños, revelando la transformación personal que la paternidad había desencadenado en él. Con cada año que pasa, su amor por Aitana crece, prometiendo seguir esforzándose por ser el mejor padre posible.

“Hace 10 años yo no era ni la mitad del hombre que soy. Era cobarde, mucho menos sabio y el amor de mi corazón eran solo canciones y no verdades. Hoy soy sólo una parte de lo que cada año me seguirás haciendo crecer, pero te juro que lo seguiré intentando. Siempre serás mi nuevo corazón. Te amo hija mía. Te amo tanto”.

Kalimba familia

Una década después, en septiembre de 2017, la familia de Kalimba se expandió con la llegada de su segundo hijo, Mikha. En una entrevista con la revista Caras, el orgulloso padre compartió la emoción y gratitud que experimentó al presenciar el nacimiento de Mikha.

“Llegó a mi vida a seguir ensanchando mi corazón. Ver cada segundo de su llegada fue una absoluta bendición. Yo le corté el cordón umbilical, igual que a Aitana. Ahora tengo dos amores de mi vida”.

Cortar el cordón umbilical de su hijo, al igual que lo hizo con Aitana, simbolizó un nuevo capítulo de amor y compromiso para Kalimba. Con Mikha, su corazón encontró otra razón para latir más fuerte, consolidando así el vínculo indestructible entre padre e hijo.

Aunque la identidad de las madres de los hijos de Kalimba se mantiene en reserva, lo que está claro es el amor y la dedicación que este artista brinda a sus pequeños. Con Aitana entrando en la adolescencia y Mikha a punto de cumplir siete años, la vida de Kalimba está marcada por la alegría y el crecimiento que sus hijos le proporcionan día a día.

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